domingo, 30 de agosto de 2015

Leyenda de la mujer de las dos bocas; Futakuchi-Onna

Hace mucho tiempo vivió en Japón un artesano apasionado por su trabajo, conocido por todos por su eficacia y buena mano, pero también por ostentar un gran defecto ya que nunca quiso formar una familia, simplemente por no tener que mantener a su mujer y sus posibles hijos. Y no es que su situación fuese mala o precaria; solo era un hombre verdaderamente tacaño.

Sin embargo, todo cambio un día, cuando una hermosa mujer llego al pueblo sola, sin padres, hermanos ni amigos, encandilando a todos con su misteriosa belleza. El artesano también quedó prendado ante sus delicados rasgos y negros y largos cabellos. Así que, olvidando la tacañería, comenzó a cortejarla hasta que consiguió casarse con ella y comenzaron a vivir juntos.

En los primeros tiempos su relación fue a pedir de boca. Ella era agradable, divertida, y se llevaban extraordinariamente bien. Además, aquella mujer parecía no comer prácticamente nada. 

Lo raro era que sus sacos de arroz iban disminuyendo considerablemente. Con el paso del tiempo, las dudas comenzaron a surgir en su cabeza. ¿Es que su mujer solo comía cuando el no la veía? Para resolver sus dudas, un día fingió ir a trabajar y en lugar de eso se quedo escondido en casa, esperando ver a su esposa comiendo.
Luego de unos minutos escucho ruidos en el almacén donde guardaba el arroz. Sin hacer ruido se acerco a observar y... pudo observar, con horror, como su mujer poseía una boca  en la parte posterior de la cabeza con la que devoraba ávidamente, mientras que comía tímidamente por su boca normal. Sus largos y negros cabellos se movían como tentáculos que llevaban la comida a ese orificio dentado, hasta que la mujer se dio cuenta de que estaba siendo observada y acabó con su vida, devorando le el rostro.

Esta leyenda japonesa nos habla de una criatura, Futakuchi-Onna, perteneciente a los Yokai 妖怪 (seres mitologicos de Japon tanto buenos como malvados), a la que la tradición describe como una mujer victima de una maldicion por negarse a comer para estar mas delgada que las demás. Su segunda boca se comporta de manera autónoma; algunas historias la describen como una copia de la boca original de la mujer, y otras como una horrenda cavidad con afilados dientes. Esta también puede gritar y murmurar, dando instrucciones a la persona maldita para que cumpla su voluntad.

  


 

Hacia un tiempo que tenia ganas de compartir una leyenda japonesa en este blog. Me gusta mucho la mitología, y es increíble, desde el punto de vista de que nunca nos la dan en el colegio, lo interesante que es la japonesa. Así que voy a estar compartiendo otras leyendas y mitos japoneses por aquí, que me encantan.
Comenten si hay alguno en especial que les guste, que me encantaría leerlo ^^.

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